15 Oct Bazo 9
Yin Ling Quan (fuente de la colina del Yin)
PARA ELIMINAR EXCESO DE LÍQUIDOS. El Bazo en la Medicina Tradicional China tiene poco que ver con el órgano anatómico conocido en la medicina occidental por el mismo nombre. Sus funciones principales son de transformar y transportar:
Transforma nuestros alimentos y así asegura la base de nuestra vitalidad, además gobierna la transformación, separación y movimiento de los líquidos ingeridos.
Si ésta función no va bien, los líquidos se pueden acumular en el cuerpo, formándose acumulaciones de Humedad y de Flema o edemas. Típicamente la gente se queja de pinchazos, se siente pesado, tienen retención de líquidos y exceso de mucosidad.
El Bazo 9 es un punto excelente para estimular ésta función del Bazo, para mover los líquidos y eliminar el exceso.
BAZO 9. El punto está localizado en la depresión bajo el cóndilo medial de la tibia, a tres cun debajo de la plataforma de la tibia. El punto suele ser sensible o doloroso sobre todo si hay señales de Humedad.
TRATANDO EL PUNTO MANUALMENTE. Se puede utilizar el punto durante una sesión de Shiatsu con la pierna apoyada en in cojín, aplicando una presión perpendicularmente con el dedo pulgar o el dedo corazón.
Se puede hacer un auto-tratamiento mientras se está sentado en una silla o en el suelo, una fricción vigorosa, circulando el dedo en el punto puede dar un estímulo muy efectivo. La presión en el punto puede ser dolorosa y el dolor se puede extender arriba y abajo.
ACCIONES DEL PUNTO. Bazo 9 es un punto poderoso para eliminar líquidos acumulados y para regular el bajo vientre, especialmente en relación a los intestinos y el sistema urogenital. Se utiliza si hay dificultad al orinar o cuando hay hinchazón y molestia abdominal.
También es útil en relación con problemas del sistema reproductor en la mujer con retenciones de líquidos, hinchazón abdominal o descargas vaginales.
Además es efectivo en el tratamiento de problemas locales con dolor e hinchazón en la rodilla.
Texto: Brian Carlin. Escuela Europea de Shiatsu
Foto: Mario Álvarez